jueves, 19 de septiembre de 2013

Toros. España. Ole, ole!

Estoy profundamente cabreada con el ser humano. En concreto, con ese sector de la población que defiende a capa y espada (y nunca mejor dicho) esos espectáculos en los que la gente aplaude y vitorea, mientras un pobre toro (y podemos aplicarlo a otras costumbres parecidas con otros animales) agoniza en el suelo, luchando por dar sus últimos suspiros.

Vamos a ver, podéis llamar tradición a lo que, para mí, es una auténtica crueldad. Podéis darme mil razones para justificar unos actos tan deleznables. Incluso, podéis clamar al cielo diciendo que la gente que piensa como yo somos unos irrespetuosos. Da igual, los actos seguirán siendo los mismos, al final morirán seres vivos y, ¡SORPRESA!, los seres vivos también sienten y sufren, aunque no puedan deciros que paréis de clavarlos una lanza con palabras.

Entre los motivos que veo y/o suelo escuchar son el tema de la cultura, el arte (aún no me ha quedado muy claro si el arte es la mancha de sangre que queda en el suelo, así como rollo abstracto) y, por supuesto, la famosa tradición. Tradiciones... en fin. También, hace años, existían tradiciones como que la mujer se quedara en casa sin poder estudiar ni trabajar, que se quemaran a las que se consideraban brujas por ser diferentes, que quien diera su opinión iba a la cárcel (bueno, esto es algo con lo que parece que todavía habrá que convivir), la Inquisición... No sé, creía que las personas habían evolucionado, que primaba el bienestar de cualquier ser vivo. 

Tampoco se me olvida lo de "si no existiera la tauromaquia, estos toros no existirían". Pues bien, qué os parece si cogemos a un perro, lo llevamos a un terreno donde comerá lo mejor y hará lo que le parezca durante unos años, hasta que a mí me apetezca. Será entonces cuando lo lleve a una plaza de toros, o lo suelte en el campo, y, rodeado de gente, morirá después de que se le claven lanzas, se lo toreen o agonice con una espada en su cuello. Cruel, ¿verdad? ¿Y si lo hacemos con una persona? ¿Cuál es la diferencia? ¿Que uno habla y el otro no? No es demagogia, es realidad. REPITO: todos los seres vivos son capaces de sentir el dolor.

Pongo el ejemplo de un perro en primer lugar, porque parece que están mejor considerados.Y digo "parece", porque de gente insensible y cruel está el mundo lleno. Yo he visto perrillos sin vida en mitad del campo, atados a un palo donde se les ha dejado morir sin comida ni agua, porque a su dueño ya no les serviría. Otros, abandonados a su merced en carreteras o por la calle.

Y doy mi opinión sobre todo esto porque ya está bien de que la gente pro "fiesta nacional" pida respeto, cuando en redes sociales leo y veo cosas que hacen que pierda toda compasión por ellas, ya sean fotos limpiando su lanza para matar al toro de Tordesillas, otras de el animal muerto mientras la gente aplaude a su alrededor o mensajes que animan a esta fiesta por "el olor a sangre". Eso no es respeto por su parte, eso es regocijarse en el sufrimiento ajeno.

"La consideración con los animales está íntimamente ligada con la bondad de carácter, de tal suerte que se puede afirmar seguro que, quien es cruel con los animales, no puede ser buena persona. Una compasión por todos los seres vivos es la prueba más firme y segura de la conducta moral". Ya lo decía Schopenhauer.

No es necesario que nos conozcan en el resto del mundo por este tipo de atrocidades, tenemos muchas más cosas que mostrar. Y soy consciente de que con este post, muchos se echarán las manos a la cabeza, pero para eso está la libertad de la que muchos hablan.